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*Si hay cosas que lo van convenciendo a uno de la intervención directa de los dioses en el diseño de la creación del hombre. Todo este orden, esta paz, este amor entre los humanos y estas maravillas del universo no pueden ser así espontáneas y nada más. Detras de todo esto algo infinitamente bueno y justo e infinitamente poderoso. De otra manera, ¿cómo se explica? A cada momento interviene la divinidad y evita las guerras, los genocidios, la pobreza, el hambre, la peste, los terremotos, las catástrofes.
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El 15 de Agosto hizo un año que asistí por primera vez al campamento de meditación de Vipassana. El mismo tiempo que llevo meditando tratando de ceñirme a las reglas o guías aprendidas en los días transcurridos allí. Y ya desde diciembre, las sesiones de meditación han sido diarias o casi diarias. Una que otra falla pero en general muy concistente. Yo mismo veo con agrado que ahora soy capaz de sentarme inmóvil por 60 minutos a luchar por mantener la agudeza necesaria para la práctica.
Life is full of misery. La vida está llena de miseria, fué el recibimiento la primera noche. No hay dioses ni seres mágicos que intervengan para contrarrestarla. Pero así y todo, “misery can be erradicated” – la miseria se puede erradicar.
Frases con las que concuerdo, unas más otras menos. Mejor dicho: la vida está llena de miseria. (100%). No hay dioses ni seres mágicos que intervengan en nada (100%). La miseria se puede erradicar. (¿Cómo?)
Cualquier paisano de esquina puede recitar una retahila de problemas, desgracias, accidentes o enfermedades que le han afectado en la vida. No hay quien se libre de las erupciones inesperadas del dolor y de las penas.
Multitudes de gente de fe y creencias ciegas, reporta milagros e intervención de dioses mágicos en sus vidas. Milagros (casualidades) esporádicas e irrepetibles. Se matan 200 al estrellarse un avión y los dos sobrevivientes le dan “gracias a dios” – al mismo supuesto dios que acaba de permitir la ocurrencia de una tragedia que llenará de dolor a 1000 personas, dejará huérfanos a un montón de niños en una situación que les afectará por el resto de sus vidas. El dios bueno, el dios bondadoso y todopoderoso, que arbitrariamente salvó a dos pendejos, no se apiadó de los otros doscientos –
¿Que explicación le dan a estos los cristianos? No… pos’que hace tiempo… ¡que’s qui’una manzana!
***Life is full of misery. La vida está llena de miseria, fué el recibimiento la primera noche. No hay dioses ni seres mágicos que intervengan para contrarrestarla. Pero así y todo, “misery can be erradicated” – la miseria se puede erradicar.
Frases con las que concuerdo, unas más otras menos. Mejor dicho: la vida está llena de miseria. (100%). No hay dioses ni seres mágicos que intervengan en nada (100%). La miseria se puede erradicar. (¿Cómo?)
Cualquier paisano de esquina puede recitar una retahila de problemas, desgracias, accidentes o enfermedades que le han afectado en la vida. No hay quien se libre de las erupciones inesperadas del dolor y de las penas.
Multitudes de gente de fe y creencias ciegas, reporta milagros e intervención de dioses mágicos en sus vidas. Milagros (casualidades) esporádicas e irrepetibles. Se matan 200 al estrellarse un avión y los dos sobrevivientes le dan “gracias a dios” – al mismo supuesto dios que acaba de permitir la ocurrencia de una tragedia que llenará de dolor a 1000 personas, dejará huérfanos a un montón de niños en una situación que les afectará por el resto de sus vidas. El dios bueno, el dios bondadoso y todopoderoso, que arbitrariamente salvó a dos pendejos, no se apiadó de los otros doscientos –
¿Que explicación le dan a estos los cristianos? No… pos’que hace tiempo… ¡que’s qui’una manzana!
Tal vez mi amigo el Ruso tenga razón: es estúpido discutir sobre Dios. Es un concepto personal, cada “dios” es distinto. No hay una definición aceptada universalmente.
Digamos que sí. Que mi amigo tiene razón.
Pero si hay “universalidad” en otros conceptos:
El dolor y la desgracia humana. Ahora sí que la TV y el Internet los han hecho universales.
Si acaso transcurren contados minutos entre noticia y noticia que no venga pintada de dolor o sufrimiento, aquí en el barrio, o en otro rincón del mundo.
El universo gira sin control. Es violento, explosivo, efímero. Los humanos entramos en decadencia y desintegración cuando apenas nos adoptamos a los alrededores de la vida.
El vacío y la nada son la meta del espejismo de la existencia.
Basta mirar en nuestro entorno para constatar el abandono y el descuido del supuesto creador inteligente del universo. A cada paso un ciego, un sordo, un lisiado. Alguien llora de dolor y de enojo ante un cadáver de un hermano o un hijo arbitrariamente fulminado por un accidente, una inundación, un teremoto, un incendio, un ataque, una bala. Vivo y consciente el previo instante, rígido e inerte en un segundo.
La respuesta de la gente: orar. Implorarle piedad a Dios. Refugio en ritos religiosos.
¿Existe un Dios misericordioso? ¿Un ser mágico y fantástico consciente de que lo que ocurre en el despelote humano? No hay uno entre nosotros que no esté acosado y acorralado por algún dolor de la existencia: un familiar enfermo o en problemas. Una muerte recién acaecida, la pena abrumadora de la ansiedad o la desgracia, arbitrarias pero omnipresentes. Nada, nadie se escapa. Nadie está protegido por mucho tiempo. Tarde o temprano es doblegado por un dolor en el camino.
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Digamos que sí. Que mi amigo tiene razón.
Pero si hay “universalidad” en otros conceptos:
El dolor y la desgracia humana. Ahora sí que la TV y el Internet los han hecho universales.
Si acaso transcurren contados minutos entre noticia y noticia que no venga pintada de dolor o sufrimiento, aquí en el barrio, o en otro rincón del mundo.
El universo gira sin control. Es violento, explosivo, efímero. Los humanos entramos en decadencia y desintegración cuando apenas nos adoptamos a los alrededores de la vida.
El vacío y la nada son la meta del espejismo de la existencia.
Basta mirar en nuestro entorno para constatar el abandono y el descuido del supuesto creador inteligente del universo. A cada paso un ciego, un sordo, un lisiado. Alguien llora de dolor y de enojo ante un cadáver de un hermano o un hijo arbitrariamente fulminado por un accidente, una inundación, un teremoto, un incendio, un ataque, una bala. Vivo y consciente el previo instante, rígido e inerte en un segundo.
La respuesta de la gente: orar. Implorarle piedad a Dios. Refugio en ritos religiosos.
¿Existe un Dios misericordioso? ¿Un ser mágico y fantástico consciente de que lo que ocurre en el despelote humano? No hay uno entre nosotros que no esté acosado y acorralado por algún dolor de la existencia: un familiar enfermo o en problemas. Una muerte recién acaecida, la pena abrumadora de la ansiedad o la desgracia, arbitrarias pero omnipresentes. Nada, nadie se escapa. Nadie está protegido por mucho tiempo. Tarde o temprano es doblegado por un dolor en el camino.
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